Todos podemos canalizar
La mayoría de las personas piensan que ser un canal consiste en canalizar información o recibir mensajes de los Seres de Luz para uno mismo y para los demás.
Eso no es del todo cierto. Ser un buen canal es mucho más que eso y no siempre significa canalizar información.
Todos podemos canalizar, cualquier persona con algo de sensibilidad puede hacerlo. Aunque no todos tenemos que dedicarnos a esa labor a nivel profesional, ya que eso sería tan absurdo como pretender que todos tuvieramos que ser músicos profesionales. Lo cual no impide que todos podemos hacer música o tocar un instrumento si tenemos la voluntad de hacerlo.
Ser un buen canal
Ser un buen canal consiste en convertirse en un instrumento divino y no solo consiste en dar información útil para su evolución a las personas que acuden a tu consulta para una Lectura de Registros Akáshicos o a una sesión de canalización. Ser un buen canal consiste en escuchar a tu propia divinidad y actuar de acuerdo con ella.
Un buen canal fluye con la vida, está en el sitio adecuado, en el momento adecuado, haciendo lo que es adecuado hacer en ese momento.
Sonreirle o decirle unas palabras amables a esa persona desconocida, justamente el día que tanto lo necesita, también es ser un canal. Ser un canal es ser Dios en acción aquí en la Tierra.
Sanación y sensibilidad
Para ser un buen canal no hace falta ser perfecto, solo hace falta elegir sanar y evolucionar con cada situación que te encuentres en la vida y empezar a ver tu sensibilidad, que tantas veces te ha hecho sufrir, como una fortaleza y no como una debilidad.
Sanarse es una clave importante para ser un buen canal. Si te amas, te sanas, si te valoras y te respetas, te sanas también y cuando te sanas, tu sensibilidad deja de hacerte daño y te abre las puertas para que empieces a manifestar tu propia divinidad.
Este mundo necesita, cada vez más, que las personas sensibles (los canales), sanen sus heridas emocionales, usen su don y salgan de su zona de confort, para que puedan aportar toda la belleza que hay en ellas.
Porque ser canal no siempre significa canalizar información, son canales también las personas que aportan ideas que mejoran el mundo.
Son canales quienes aportan belleza, armonía, paz y felicidad, son canales quienes siguen las directrices de su propia divinidad.
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